Las propiedades de la manteca de karité son verdaderamente milagrosas, hasta el punto de que las mujeres africanas veneran el karité y desde hace siglos lo llaman "el árbol de la juventud". Obtenida de sus piedras mediante presión en frío y presente en esta rica crema, la manteca es increíblemente preciosa para la piel del cuerpo, porque sabe realzar su belleza, gracias a sus virtudes nutritivas y emolientes. Además, se acompaña de la maravillosa manteca de coco, que suaviza la piel y, de nuevo del coco, el extracto y destilado de la pulpa, hidratante y elastificante. La formulación finalmente se enriquece con la presencia de vitamina E, un fantástico antioxidante natural.

Sin siliconas, parabenos ni vaselina.
97% ingredientes de origen natural
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